Amanecíamos un Tú y un Yo.
Nunca un nosotros.
No me preguntes por qué, pero nuestras sábanas nunca amanecían abrazadas como en las habitaciones de los amantes normales. Siempre despertábamos al mismo tiempo, y siempre al mismo tiempo, sabíamos que estaríamos solos en este mundo.
Y a pesar de que sí follábamos -y lo hacíamos como auténticos animales- no había amor en aquella habitación, como en el resto de la casa. Follábamos como se hace en un hotel, como se hace un sábado a las 4 de la mañana cargados de heroína hasta las cejas.
Era sexo con pasión, mas nunca con amor.
Cada mañana desayunaba con el dolor pegado a los labios; el dolor de tener alguien tan cerca sabiendo que jamás llegará a amarte, y que tú jamás llegarás a amarle.
Me besabas en la frente como si realmente lo hicieras con ternura, y yo cerraba los ojos, como si pensase que la había.
Eramos un par de payasos en un circo triste, cruel, amargo y silencioso.
Y aún hoy, no me salen las lágrimas por estos ojitos secos.
Hoy solo puedo velar tu tumba, pero jamás sufriré.
Pues jamás te amé.
E-mailméame :)
lachicadelpanueloazul@hotmail.es
sábado, 28 de agosto de 2010
martes, 17 de agosto de 2010
Es el que solo se siente una vez.
(John Mayer · Free Falling)
Una mañana de Agosto sopla una brisa fresca que me agita el pelo. Una brisa pasajera que arrastra con ella un amor rápido, un amor buscado, como un café antes de fichar. Que viene, se saborea, y se va.
Y pienso en las veces que me ocurrirá esto en la vida.
¿Pero sabes qué?
Que el amor verdadero no lo encuentras en Agosto, ni con una brisa fresca.
El amor verdadero llega sin darte cuenta en pleno Enero, bajo la sombra de una hoguera.
Es un amor que te acaricia los labios. Es un amor que te cala el corazón de pintura roja. Que susurra al oído palabras cursis. Que te canta canciones silenciosas en una guitarra española, de esas que según salen de entre los labios, se pierden en el viento para quedar atrapadas en la memoria de dos, y no volver a ser cantadas. Es un amor que penetra por cada poro de la piel, empapando las venas de cosquilleos y la mente de capullos, para que cada día florezca una flor nueva, con un aroma nuevo que cada día amar. Que se escribe en servilletas de carretera, que serán quemadas en alguna hoguera para que nadie más comparta esas letras de amor. Que se palpa con dos dedos y con el alma haciéndola niña otra vez, haciéndola suave como el satén.
Es un amor, que se hace querer.
Que cada amanecer se adhiere a tu pelo como las gotitas del rocío y te pesa por la mañana, hace que te cueste levantarte de la cama y solo te apetece quedarte ahí acurrucadito entre sus brazos para no moverte nunca más.
Y se evapora con el sol para que, un día más, tengas fuerzas para luchar por él.
El amor verdadero, es el que viene un día sin ser invitado, y se queda para no irse nunca jamás.
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Autoconvicciones,
Granos de Azúcar
lunes, 16 de agosto de 2010
Tú.
Hoy vas a ser esa mujer que nadie nunca quiso.
Serás imperfecta, llena de errores, mujer con torpezas, mujer desarreglada.
Serás la mujer contra la que tu madre te educó, una anti-señorita.
Pero serás una mujer íntegra.
Serás una mujer bella en tu espejo.
Mujer con los tacones en alzas, mujer sonrojada.
Hoy sabrás que tu vida nunca más será un fracaso.
Que nadie puede hacerte daño.
Solo tienes que levantarte de la cama.
jueves, 12 de agosto de 2010
Soy feliz :)
¿Sabes qué?
¡Allá tú, bonito!
Soy feliz, contigo o sin ti. Siempre lo he sido y aunque las circunstancias ahoguen, seguiré sonriendo. Tengo un don o una maldición dentro de mí, que me impulsa como un trampolín a sonreír y que no puedo remediar. Y hoy, precisamente hoy, no me da la gana. Quiero volaaaaaaaaar. ¿Sabes lo que significa eso? Alejarme de ti y tu mala onda.
Hoy vuelvo a ser yo, señores.
Vuelvo a mi antigua vida, la que te entregué y no quisistes para ti; hoy la esparciré cachito a cachito en labios ajenos.
Pienso encontrar las manos más suaves del mundo mundial.
Pienso encontrar el cuello con el mejor perfume del mundo mundial.
Pienso encontrar la lengua más dulce del mundo mundial.
Y nada será gracias a ti. Ni al hueco de tu espalda.
sábado, 7 de agosto de 2010
Se cayeron las estrellas de mi cielo.
Has hurgado en mi pecho y me has arrancado el corazón, llevándote con él todas mis venas.
Como cuando tiras de una flor y arrastras con ella la raíz.
Te has llevado contigo mi alma.
Soy como una bolsa de plástico.
Vacía, volátil e insulsa.
Y te odio, te odio y te odio.
Pero te quiero aún más.
viernes, 6 de agosto de 2010
Diario de una Idiota XIII
Un día, sin darme cuenta, dejé de desearte locamente como siempre.
Pero no te creas, bombón, que aún te pienso.
En ti, en los sueños y lo inimaginable, tu pelo, tus ojos y tu sonrisa. En lo perfecto que apareces de repente entre todo lo demás.
A veces pienso que no debería haber tirado la toalla, a pesar de lo que diga o escriba. Haber luchado por ti y por... por todo, ¿qué quieres que te diga? Pues si incluso aún quiero recordarte como antes, será por algo. Por algo que quiera o no quiera, pero solo Dios sabe si tú echarás de menos los reojos y las sonrisas disimuladas. Y no me vengas con esas de que no te dabas cuenta... que nos conocemos, pequeño. Y tú, como yo, estabas atado a aquel juego. Te hacías de rogar, sí, y si darme cuenta te rogué, también. Pero ten en cuenta de que si es hoy, quien hubiese estado en mal escalón hubieses sido tú, pues hoy me valoro y soy reina de mí, y de quién a mí me apetezca serlo, porque no hay quien me haga arrastrarme.
Hoy jugaríamos con otras cartas.
Y al fin y al cabo, serías feliz. Seguro. Y ambos lo sabemos.
Sabes como yo que te hubiese hecho feliz, que a cualquiera puedo hacerle sentirse feliz. Soy como vaselina entre los dedos, tan fácil, resbaladiza y fina.
Ojala me hubieses querido.
Más por tu bien que por el mío.
Tu siempre deshojada Idiota.
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